BIENVENIDO LIBRA

Sucede el equinoccio, el Sol ingresa a Libra.☀️♎.

El punto cero del circulo zodiacal es Aries, el inicio. El punto 180 es Libra, el polo complementario que equiLibra.
Todo movimiento pendular esconde en sí mismo el principio circular. En el aparente movimiento del péndulo que va de derecha a izquierda, de un lado a otro, evidenciamos que en realidad todo es circular. A medida que nos vamos vinculando nos vamos completando, aprendiendo de las discordias y las coincidencias que nos traen los diferentes amores, los distintos vínculos con lo que existe, nos volvemos cada vez más conscientes del movimiento circular. Si aprendemos de las pérdidas y los grande logros que cada relación nos deja, adquirimos más firmeza en nuestro deseo y más capacidad para compartirnos con responsable libertad.

Cuando el sol entra en Libra, el #zodiaco llega a su punto medio. Libra abre la otra parte y el aprendizaje consiste en desarrollar la capacidad de integrar la otra mitad. Libra despierta una inteligencia: la de entender cuál es la energía que necesitamos incorporar para que el sistema se compense.


Tendemos a ver lo diferente, eso que es opuesto, como si fuera un contrincante. Enfatizamos el carácter acechador de lo distinto y creemos que la diferencia sólo atenta contra nosotrxs amenazando nuestro privilegio o la idea romántica que tenemos de nosotrxs mismxs y la realidad que nos circunda. Pero en ese acto, cometemos el error de olvidar el carácter complementario de lo opuesto. Vemos el contrincante y olvidamos al compañerx. Percibimos las diferencias como una lucha en lugar de animarnos a dialogar en ellas para construir de ese modo relaciones más pacificas, reflexivas, justas y amorosas.


Somos siempre las dos cosas buscando equilibrio: El enemigo y el compañero. Lo somos con los otrxs y por supuesto también con nosotrxs mismxs. La que se boicotea, la que se anima. La que se arriesga y la que duda. La que ama y la que busca destruir. La que cuida y la que amenaza. La que arriesga y la que teme perder. La noche y el día danzan creando los ciclos del vivir. Todas las mitades nos hacen. Luchar por ser una es lo que nos quita energía, el trabajo (infinito, sagrado y complejo) consiste en equilibrar las aparentes polaridades para habitar lo circulares que somos.

Nos pegamos a nuestros deseos de manera tan soberbia e infantil, que tenemos relaciones cada vez más superficiales y por ende, estamos cada vez más solxs. Cometemos el error de buscar la libertad en un amor que carece de compromiso afectivo, que no tolera el tiempo ni el trabajo introspectivo que el vínculo necesita para evolucionar hacia la armonía. En verdad, lo que escondemos en esa inmadura idea de libertad, es el profundo miedo a revelarnos en la diferencia. Un especie de terror subconsciente de ver en lo otro, nuestro profundo reflejo, y tener que soltar el caprichoso anhelo de ser mejores y de que las cosas sean a nuestro modo unilateral.


Libra quiere la otra parte. Entiende que es imposible ser solo y que en la armonia de los opuestos, es decir, en la construcción reflexiva del vínculo con lo distinto, se despierta el verdadero camino del amor, que no sólo es propio, sino que se comparte, y en ese compartir es que sentimos autoafirmarnos y vibrar la libertad de ser.

El yo y el Tú que danzan en el círculo del Nosotrxs. Un pendular irresoluble, un ir y venir, una duda que no cesa.

NOSOTRXS, una entidad única que se manifiesta en constantes tensiones y armonías. Vincularse es eso: crear un nosotrxs, y para eso tengo que trabajar en sociedad con la otra parte. Ni en simbiosis ni en constante enemistad.
¿estamos dispuestos a construir relaciones más verdaderas? ¿qué entendemos por amor? ¿Qué pretendemos que la otra, o el otro o el otre, nos dé de primera mano como si nos conociera tanto (o tan poco) como nos conocemos nosotrxs mismxs?. Las parejas se construyen, los vinculos se laburan. Compartir no es sólo confirmarme, es también transformarme.

Se abre un Portal con el equinoccio. Se disponen las energías para socializar, enamorarse y cocrear. Traer siempre a escena lo que Libra trae, lo injusto, la discordia, la otra mitad que nos guía en nuestro desarrollo. El justo vaivén entre lo que amo y lo que no tolero para poder crecer en la experiencia de las relaciones. Contemplar la belleza de lo distinto y también su miseria, para elegir y elegirme. Compartir el arte que soy sin olvidar que nunca tengo toda la belleza que mi ego quisiera. Ser mientras somos aceptando que ningún polo será jamás el dueño de la entera razón.


Quien se anima a este juego, gana!

NUMEN – Escuela de Astrología y Lenguajes simbólicos –

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